Randy Gradishar, el último en ser incluido en el Salón de la Fama de la NFL, aprovechó su discurso de aceptación el sábado para transmitir un mensaje del Evangelio de manera clara y contundente. Gradishar, conocido por su destacada carrera como linebacker de los Denver Broncos en la década de 1970, formaba parte de la famosa defensa "Orange Crush". Durante su discurso, expresó su agradecimiento a su esposa y su pastor, a quienes describió como sus “guerreros de oración clave”.
Sin embargo, Gradishar dedicó un momento especial para rendir homenaje a Archie Griffin, el ex corredor de la NFL con quien compartió tiempo en la Universidad Estatal de Ohio. Griffin le extendió una “invitación invaluable” para unirse a un estudio bíblico de la Comunidad de Atletas Cristianos en el campus, lo que Gradishar consideró un punto de inflexión en su vida.
A pesar de haber crecido en la iglesia, Gradishar reveló que no había escuchado una presentación clara del Evangelio hasta esa reunión de la FCA en 1974. “A los 22 años”, le dijo a Griffin desde el podio, “recibí a Jesucristo como mi Señor y Salvador”.
Gradishar compartió las “cuatro verdades simples” que aprendió en esa reunión:
1. Creación y Amor de Dios: Los seres humanos fueron creados a imagen de Dios (Génesis 1:27), y el Señor ofrece un plan para nuestras vidas.
2. El Problema del Pecado: Todos han pecado y están alejados de la gloria de Dios (Romanos 3:23), lo que impide conocer el amor y plan divino sin una relación de salvación con Jesucristo.
3. El Camino a la Reconciliación: Dios proporcionó un camino para la reconciliación a través de la muerte y resurrección de Jesucristo (Juan 3:16 y Juan 14:6).
4. La Salvación: La salvación se recibe al entregar la vida a Dios, arrepentirse del pecado, aceptar Su perdón y pedir a Jesús que sea nuestro Señor y Salvador personal.
Durante su discurso, la cámara frecuentemente capturó a Griffin sonriendo mientras Gradishar hablaba, y muchos en la audiencia aplaudieron el mensaje del Evangelio del ex linebacker de los Denver Broncos.