En su centésimo cumpleaños, el pastor jubilado Marshall Reinhardt predicó el Evangelio durante un servicio especial en la Iglesia Bautista Awtrey-Westville en Acworth, Georgia. Nacido en Georgia el 1 de diciembre de 1924, Reinhardt compartió un mensaje poderoso, instando a la congregación a aceptar a Jesús como “el Señor de su vida”.
Este evento fue aún más significativo al ser presidido por su hijo, el pastor Tommy Reinhardt, quien, además de honrar la vida y el legado cristiano de su padre, destacó su dedicación incansable al servicio del Señor.
Durante la ceremonia, el pastor Tommy subrayó que, aunque era importante rendir homenaje a su padre, el objetivo central era glorificar a Dios. Citando 1 Timoteo 5:17, Tommy resaltó la importancia del liderazgo cristiano en la iglesia, reconociendo la trayectoria pastoral de su padre, quien lideró diez iglesias a lo largo de su vida.
Marshall, al compartir recuerdos de su vida, destacó momentos significativos, incluyendo su relación con su esposa Ruth, quien encontró la fe a través de un avivamiento cristiano. También compartió su propio viaje de fe, que comenzó con dudas y dificultades, pero que se consolidó después de una profunda experiencia espiritual.
En su mensaje, instó a los fieles a vivir con alegría y ser un reflejo de la luz de Jesús en el mundo. “Nuestras acciones impactan nuestro testimonio ante los demás”, dijo, enfatizando la importancia de vivir de acuerdo con los principios cristianos para influir positivamente en quienes nos rodean.
“Estamos en deuda con Jesús, debemos vivir para Él, glorificar y honrar Su nombre. La gente debería poder ver a Jesús en nuestras vidas, en nuestras acciones, en la forma en que llevamos a cabo nuestros negocios”, predicó.
Marshall también alentó a los nuevos pastores a obrar en amor y oración, recordándoles: “Recuerden quién los llamó y hagan la voluntad de Dios. No pueden mejorar la voluntad de Dios”.
El pastor Tommy Reinhardt expresó su profundo agradecimiento por las lecciones y sabiduría recibidas de su padre, invitando a los jóvenes a buscar la orientación de los mayores y resaltando la importancia de que los ancianos compartan su fe con las nuevas generaciones. Reflexionó sobre su niñez como hijo de un predicador, recordando cómo su familia ayudaba a la comunidad con amor y dedicación.
La celebración del centenario de Marshall Reinhardt reunió a familiares y amigos que viajaron para honrar su vida y legado. Ingrid Surkan, una vecina que fue guiada a la fe por él, destacó su dedicación a las Escrituras, revelando que las ha leído 47 veces.
El evento culminó con una fotografía que abarcó cinco generaciones, un símbolo del impacto duradero que Marshall ha tenido en su familia y en la vida de aquellos a quienes ha servido.